En medio de la controversia desatada en el aeropuerto Ernesto Cortissoz de Barranquilla, la Policía se defiende de las acusaciones de atropellos durante un procedimiento rutinario. El presidente del Partido Conservador, Efraín Cepeda, levantó la voz denunciando una presunta “guerra sucia” en su contra, luego de un incidente que involucró a su hija en un control policial.
Según Cepeda, su hija fue sometida a un escrutinio inusual mientras abordaba un vuelo internacional, generando indignación por lo que considera un trato desigual debido a su condición de senador. En respuesta, el presidente Gustavo Petro salió al paso argumentando que este tipo de revisiones son parte de un protocolo estándar al que todos los pasajeros están sujetos.
El mandatario relató el incidente con tono irónico: “¿Qué no sabe que yo soy hija de un senador?”, habría exclamado la joven, desatando la reacción del personal a cargo. La tensión se incrementó hasta el punto en que el piloto amenazó con cerrar el avión si no se respetaba el procedimiento establecido.
Fuentes policiales aseguran que el escrutinio realizado a la hija de Cepeda fue parte de una revisión aleatoria que incluyó a otras 11 personas con equipaje candado. Niegan categóricamente cualquier tipo de trato preferencial o atropello, contradiciendo las afirmaciones del congresista.
La polémica continúa creciendo en torno a este incidente, con opiniones divididas sobre si se trató simplemente de un procedimiento de seguridad estándar o si hubo motivaciones políticas detrás del mismo. Las redes sociales arden con debates y especulaciones, mientras las partes involucradas mantienen posturas firmes en medio de este conflicto público.